imagenes de amor animadas , tarjetas - postales
Historia
En primer lugar se encuentra Angie leyendo Amar a sus hijos a propósito. Mantener su amor en era exactamente lo que necesitaba para complementar sus otros libros!
Me habían diagnosticado bipolar 1 hace casi tres años y he aprendido que hay una creencia popular dentro de la comunidad bipolar que somos impotentes en nuestro diagnóstico. Mis cambios de humor estaban matando a mis relaciones y desgarrando mi vida aparte.Después de investigar y leer muchos foros acerca de este diagnóstico, me encontré con que me puse cómodo creyendo la mentira de que bipolar 1 me controlaba. Era más fácil para apagar mi cerebro fuera y reaccionar a cada gatillo y culpar a mis circunstancias y ambientes en lugar de tratar de vivir potente y asumir la responsabilidad de mis propias acciones. Después de muchos meses de vivir sin poder, corazones rotos y codearse con otras personas enfermas para crear una zona de confort tóxico, me di cuenta de que estaba solo. Sí, rodearme de gente aparentemente "seguras", pero rotas que estaban de acuerdo con que no me estaba ayudando a mi situación y el verdadero problema que nos ocupa. Mi corazón me decía que había más en este diagnóstico no sólo hacer frente a ella.La medicación era una cosa, que se encargó de la logística de mi situación, pero mi corazón todavía estaba muy enfermo y fuera de control. Yo sabía que algo tenía que pasar, y este libro junto con muchos de sus otros libros, me ayudó a identificar las mentiras que me estaba creyendo que financió mis comportamientos impotentes. anticipé mucho este libro y estoy muy contenta de su fin está aquí como define Danny Silk lo que el poder real y la libertad es, y lo que realmente tienen el control sobre. Se define lo que la esclavitud se parece demasiado y me encontré con muchos paralelos. Las ideas que se expresan en esta maravillosa pieza han ayudado a comprender cómo llevar a cabo las relaciones en todos los niveles con todo tipo de personas. Ahora entiendo que puedo ser bipolar, pero eso es sólo un diagnóstico, y no es excusa para la mala vida.
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